La localidad de Lantejuela se encuentra a una distancia de 76 km de Sevilla capital, su población asciende a 3642 habitantes.

Según dicen, La Lantejuela se creó debido al abundante trabajo que existía en los campos de alrededor.

En su término se han encontrado y se siguen hallando muchos vestigios, como monedas y otros objetos que indican la existencia probable de una ciudad romana que bien pudiera ser Linula, a 500 metros del casco urbano. En otras fincas también se han hallado restos arqueológicos y monedas que llevan grabado el nombre de Munda. Asimismo, han sido encontrados platines de plata con la misma inscripción.

Según las actas del Cabildo del Ayuntamiento de Osuna, La Lantejuela fue a comienzos del siglo XIX una aldea fusionada con el municipio de Osuna, constituyéndose en ayuntamiento independiente entre los años 1830 y 1941, aproximadamente. Confirman estos hechos los documentos encontrados por González Moreno en el Archivo Histórico Nacional de Madrid, en cuya Sección de Silografía hay un informe remitido por el Alcalde de La Lantejuela, D. F.J., a Baeza el 15 de septiembre de 1876, que dice así: Este sello municipal de Lantejuela estuvo en uso desde el año 1835, en que dejó este pueblo de ser aldea de la Villa de Osuna, hasta el año 1857.

Sobre el origen del topónimo, no se sabe con certeza si deriva del apodo de un rico hacendado de la zona, El Tío Lentejuelas, o de Lentejita, como al parecer gustaba llamar a la aldea la Duquesa de Osuna.

Según el diccionario de la Real Academia de la Lengua, se puede definir Lantejuela o Lentejuela como planchita redonda de plata, u otra materia, de que se usa en los bordados, asegurándola en la ropa con puntadas que pasan por un agujerito que tiene en medio. En el diccionario ideológico de la lengua española, su autor Julio Casares afirma que lentejuela o lantejuela es diminutivo de lenteja, que se representa gráficamente por una laminilla o disco pequeño de metal brillante, agujereado, que sirve para bordar, asegurándolo en la ropa con puntadas.

Esta afirmación lingüística está directamente relacionada con el nombre de la población, ya que hay documentos que prueban que, en las inmediaciones del actual pueblo de La Lantejuela, en fecha no precisa, se encontraron varias lentejuelas de oro, enterradas bajo el suelo, y sacadas con la punta de un arada, y de aquí tomó el título aquella dehesa o donadío.

El hecho que relatamos no es un caso excepcional. El descubrimiento en el campo, durante la reconquista de Andalucía o al comienzo de la Edad Moderna, de insólitas piezas cuyo hallazgo no era frecuente, dio motivo a que determinadas fincas rústicas, e incluso las poblaciones que sobre ellas se alzaron, tomasen por denominativos estos curiosos vocablos, con independencia de sus antiguos topónimos. Un claro exponente de ello lo encontramos en aldeas, villas y pueblos que perdieron su original denominación romana o musulmana por el casual hallazgo de imágenes religiosas, tallas arqueológicas, instrumentos, vestimentas o armas. La extensión del municipio es de 18km2 y su altitud es de 152 m sobre el nivel del mar.