La poblaicón de Ecija se encuentra a 94 km de distancia de SEvilla capital y posee una población de 37900 habitantes.

Écija fue fundada por el griego Astur, origen de su nombre.

En la Edad Antigua, la etapa romana, fue una de las de máximo esplendor, convirtiéndose en la Colonia Agusta Firma, siendo la capital de un convento jurídico de la Bética.

En la etapa visigótica se estableció un gran foco cultural y religioso. San Fulgencio fue nombrado obispo de Écija y su hermana Santa Florentina fundó el Convento del Valle, primera comunidad femenina fundada en Andalucía.

En la etapa musulmana, Estigga es su nombre, aunque debido a la producción y comercio del algodón es conocida también como Medina Al-Cotón.

En la Edad Media, es conquistada por Fernando III El Santo, en 1.240.

Alfonso X El Sabio repartió el término municipal de Écija entre los conquistadores.

En 1.404, Enrique III le concedió el título de Ciudad.

En la Edad Moderna, Carlos I le concedió el título de Muy Leal.

Felipe IV concedió a los capitulares el tratamiento de señoría y el derecho a utilizar en la sala capitular dosel con pintura de la Inmaculada, por haber sido Écija el primer pueblo de la Cristiandad que defendió el dogma concepcionista.

Felipe V le concedió los títulos de Constante, Leal y Fidelísima.

El siglo XVIII es considerado el Siglo de Oro Ecijano, por la riqueza económica, por el poderío aristocrático y eclesiástico y por las creaciones artísticas llevadas a cabo en la ciudad.

En la Edad Contemporánea, en 1.880, el rey Alfonso XII le concedió al Ayuntamiento el tratamiento de Excelentísimo.

En 1.966 es declarada Conjunto Histórico-Artístico.

En Écija pueden admirarse interesantísimas construcciones, tanto religiosas como civiles, comprendidas entre los siglos XIV al XVIII. Son muy abundantes los palacios de esta época, con bellas portadas y patios enclaustrados.

La población tiene una extensión de 976 km2 y una altitud de 100m sobre el nivel del mar