Cuenta con una población de 3137 habitantes y una extensión de 66 km2.

En tiempo de Felipe II y para paliar el mal estado de las rentas del estado, se optó por «que se vendieran hasta mil hidalguías a personas de toda clase sin excepción ni defecto de linaje ni otras máculas, la venta de jurisdicciones perpetuas, de los terrenos baldíos de los pueblos, dejando a estos los puramente necesarios». Por real cédula se consentía la venta de la jurisdicción de la naciente villa del Colmenar, que se componía de los cortijos Napolin Alto y Bajo, Barrancos, Peñones, Jaral, Ramos y Colmenar, inscritos en la jurisdicción de Málaga. Fueron comprados por el vecino señor Gómez de Cohalla. En 1560 se procedió al deslinde y amojonamiento del término y en 1566 comienzan las inscripciones de las partidas de bautismo, matrimonios y defunciones.