La Edad de los Metales está representada por un yacimiento arqueológico situado prácticamente dentro del casco urbano, en un lugar conocido como La Minilla. También existen restos de su etapa ibérica por esculturas descubiertas en el paraje conocido como Cabezas del Rey. Según atestiguan las inscripciones encontradas en el lugar, hubo un asentamiento romano en estas tierras. La romanización actuó de forma intensa, potenciando la riqueza agrícola de sus suelos y las vías de comunicación.

También estuvo poblada durante la dominación árabe siendo conquistada por Fernando III a principios del siglo XIII, quedando sujeta a la jurisdicción de Córdoba hasta el año 1647 en que Felipe IV le concedió cédula de independencia, donando mas tarde su jurisdicción al conde duque de Olivares.

La despoblación y subsiguiente decadencia se dan a lo largo de los siglos XVII y XVIII, motivados por lo excesivos impuestos que se les imponían a sus vecinos, el desinterés que sus señores mostraban por la villa y la colonización de Carlos III. Actualmente cuenta con 7362 habitantes con una extensión de 137 km2 con una altitud de 358 m sobre el nivel del mar. La distancia entre cordoba capital es de 41 km.